Si hay mucha humedad, el modo puede crecer en prácticamente cualquier material orgánico. Por lo tanto, no debería sorprendernos que aparezca también en los medios de cultivo. No obstante, este tipo en concreto pertenece a los hongos saprófitos, un grupo de hongos que descomponen material vegetal muerto. Constituyen una parte esencial del ecosistema en los medios de cultivo y no son patógenos ni nocivos en modo alguno para las plantas ni el ser humano. Es más, los estudios han demostrado que pueden incluso influir positivamente en el crecimiento y la resiliencia de las plantas.
Efectos positivos de los mohos
Si estos mohos están activos durante la fase de crecimiento, pueden ayudar de muchas formas a las plantas. Por poner un ejemplo, los hongos saprófitos descomponen las moléculas orgánicas complejas de los medios de cultivo y, al hacerlo, liberan nutrientes para las plantas, como el nitrógeno y el fósforo. Además, se sabe que algunos tipos suplantan a los patógenos de las plantas en la raíz, lo que protege al cultivo. De hecho, cumplen tan bien este cometido que algunos tipos de hongos saprófitos se utilizan habitualmente como fungicidas microbianos.
Efectos negativos de los mohos
En esencia, el único efecto negativo de la presencia de estos mohos es que crecen en antiestéticas colonias que en ocasiones pueden desprender mal olor. Las colonias de moho suelen aparecer entre los medios de cultivo y el envase si se almacenan a temperaturas elevadas. En estas circunstancias, se puede acumular agua entre los medios de cultivo y el envase, dando lugar al caldo de cultivo ideal para que proliferen estos mohos.
¿Qué hay que hacer si hay moho?
Insistimos en que el moho no afecta negativamente a las plantas, por lo que no hay que preocuparse si lo ve en los medios de cultivo, pero entendemos que quiera limitar su crecimiento. El crecimiento de moho es una cuestión puramente estética. Si observa hongos en sus medios de cultivo, le recomendamos airear un poco el material comprimido y mezclarlo bien. Esto interrumpirá el crecimiento fúngico.
Cuando se usen los medios de cultivo, desaparecerá todo el crecimiento fúngico y no debería reaparecer durante las fases posteriores de cultivo. Vigile las plantas y deje que la superficie de los medios de cultivo se seque periódicamente con el fin de reducir la humedad relativa de los mismos.
En casos puntuales y en circunstancias muy específicas, el moho puede absorber parte del nitrógeno disponible añadido como fertilizante inicial de los medios de cultivo. Por eso, siempre es importante observar las plantas en su crecimiento y agregar más fertilizante cuando sea necesario.
Tipos habituales de hongos saprófitos
Ahora que ya sabe que no hay motivo para preocuparse por este tipo de mohos, nos gustaría explicarle algo más sobre las dos clases más comunes: las especies de los géneros Trichoderma y Peziza.
Trichoderma
Se sabe que los hongos de esta especie inhiben el crecimiento de hongos patógenos. Se ha demostrado que este grupo de hongos impiden ataques de microorganismos patógenos de las plantas durante el cultivo, por lo que el uso de la especie Trichoderma está extendido en numerosos fungicidas comerciales.
Por lo tanto, los Trichoderma se pueden considerar un tipo de hongos beneficiosos que ofrecen una fuente de protección natural a las plantas.
Las esporas de Trichoderma pueden estar presentes de forma natural en la turba, y en determinadas condiciones, si se dan la humedad, la temperatura y el pH propicios, pueden germinar, por lo que comenzarán a surgir los hongos Trichoderma. Aunque normalmente no se puede percibir a simple vista la presencia de Trichoderma, en ocasiones, si se condensa agua entre el producto y el envase, se puede observar Trichoderma en forma de mancha blanca en la superficie de los medios de cultivo.
Manchas blancas de moho Trichoderma en medios de cultivo
Peziza ostracoderma
Se trata de un tipo de hongos saprófitos con aspecto de polvo amarillento. Se conocen comúnmente como moho de canela o turba. Este tipo de moho no se encuentra nunca en materia viva ni en plantas, solamente se puede encontrar en la superficie del medio de cultivo. En cualquier caso, es inocuo.